Sensible la esperanza inquieta
que se agita
con la bonanza de tus palabras.
De tu humilde calma
sale una danza de alaridos
que embarcan a mi corazon hacia tierras placidas.
Pendientes limpidas
hacen deslizar velozmente mi alma encandilada.
Ensayo antiguos canones de conquista
despliego la habilidad de un guerrero
para eludir tus indecifrables dudas
que no tardan en tocar a mi puerta.
Te entretengo en el coloquio
las palabras te distraen
mientras yo te miro
y pienso que no toco el suelo.
Atisbos de ruegos
se compaginan con la bella melodia
que me acompaña en este camino de soñar distinto.
Entumesidos mis ojos
segregan literalmente amalgamadas huestes de jubilo
que se empecinan en autentificar la reafirmacion del amor naciente.
Lindo poema!
ResponderEliminarLa verdad, no te había leído antes, creo, y me gusta como escribes, mucho... Seguiré leyéndote. Feliz día!
ResponderEliminarDelicioso nacimiento. Un beso
ResponderEliminares lindo eso de no tocar el suelo cuando esta ante la persona que tu corazón elige para amar... ese momento es infinito... abrazos
ResponderEliminarun abrazo amiga!!
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