Yo te quería mía, mi amor ¡yo te quería!
bajo el plomizo cielo te amé ¡no sabes cuanto!
cepo de poseídos, el frio, aviva el llanto
y en la cruel desidia sentí que me ahogaria.
Arpegios en la noche de un sol que se moría
que avienta la agonía del duro desencanto
es que ya no se vive por dios¡ te extraño tanto!
al mar de los sargazos por verte viajaría.
Hoy día me atrinchero sangrando moribundo
bajo ese latifundio del mal que me doblega,
corre de llaga en llaga lo que era tan profundo,
sintiendo al otro yo, de ayer, que vive y ruega,
lo imposible, porque alguna vez fuiste mi mundo
y mi mundo serás mientras que la muerte llega.
Excelente soneto. Duro en su tristeza. Golpea fuerte
ResponderEliminargracias Carmen!!
EliminarHermoso ¡¡¡ versos con palabras justas.
ResponderEliminargracias agradezco tu visita ...saludos!!
EliminarBELLO Y MUY REAL, GRACIAS AMIGO ANDRES...
ResponderEliminargracias por pasar!!
EliminarHermoso Andres gracias...perdona por los que no he leido...me fascinan.
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